martes, 14 de diciembre de 2010

Limitaciones para mejorar

Está claro que las posibilidades de llevar adelante mejoras en la organización institucional de nuestros  jardines, escuelas y colegios (instituciones educativas), conllevan  una serie de limitaciones y también insospechadas fortalezas; lamentablemente las primeras generalmente priman a la hora de tomar decisiones y es así como se forma el círculo que no conduce a buen efecto.
Siempre esperamos que las propuestas tengan la seguridad de un resultado positivo, en lugar de prepararnos para enfrentar los yerros, para, en consecuencia, retomar el camino replanteando las ideas, modificándolas y aprendiendo, reformando y aprendiendo, adaptando y aprendiendo, llegando por fin a nuestra meta y con ello la producción de una experiencia invaluable.
No necesitamos tener a nuestro alcance una pala para escarbar en la tierra, podemos hacerlo con nuestras manos o con cualquier otro instrumento, lo importante es comenzar, como dice Juan Martín Moye: "Cuando se presente una buena obra por hacer, y se está moralmente seguro de que es la voluntad de Dios hacerla, podemos atrevernos a emprenderla, aunque no se vean, en el presente, los medios para llevarla a término".

Una escuela en Huancavelica

El rincón de los Gnomos en un jardin
No esperemos tener todo para iniciar la transformación del lugar donde trabajamos, aunque viéndolo bien, casi lo tenemos todo, somos profesionales de la educación, conocemos y manejamos el diseño curricular, conocemos la comunidad que nos rodea, conocemos a nuestros alumnos, así que  podemos comenzar ahora, de no ser así nunca tendremos la satisfacción de saber si podíamos o no hacerlo.
La vida está poblada de grandes experiencias que se lograron luchando constantemente, pero muchos piensan que los triunfos son como los accidentes, que eso solamente les pasa a los demás.